1Batir la manteca y el huevo hasta obtener una mezcla cremosa
2Agregar las yemas y batir
3Tamizar el harina, la sal y el polvo de hornear
4Mezclar todos los ingredientes e ir agregando la leche de a poco
5Amasar ligeramente y estirar hasta un grosor de 2 centimetros
6Cortar los scones con un vaso o un corta pasta
7Colocar los scones en una placa enmantecada
8Pintar con la yema batida